Demócratas y republicanos alcanzaron este miércoles el primer acuerdo significativo en las últimas décadas para implantar un control a la posesión y uso de armas en Estados Unidos, donde la polémica sobre las muertes causadas por esta falta de regulación no ha dejado de crecer tras el tiroteo en mayo en un colegio de Uvalde (Texas), en el que un joven fuertemente armado asesinó a 19 niños y dos de sus profesoras.
El proyecto de ley contempla medidas como aumentar la edad de compra de rifles semiautomáticos de 18 a 21 años, prohibir la importación, venta, fabricación, transferencia y posesión de dispositivos de alimentación de municiones de gran capacidad, así como establecer nuevos delitos por tráfico de armas y compraventa fraudulenta.
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, ha elogiado a los negociadores bipartidistas y ha dicho en el pleno del Senado que el proyecto de ley representa «un progreso y salvará vidas», agregando que «aunque no es todo lo que queremos, esta legislación se necesita urgentemente». «Pasaremos a la aprobación final lo antes posible. Espero que el proyecto de ley se apruebe en el Senado a finales de esta semana», ha señalado Schumer.