Cárcel en La Mosquitia es fundamental para eliminar el narcotráfico, asegura Defensa

La ministra de la Secretaría de Defensa, Rixi Moncada, afirmó que es fundamental la presencia militar y policial en La Mosquitia para alejar a los narcotraficantes que hay en dicho sector, además de que se consultará con los pueblos de la zona para la construcción de la cárcel de máxima seguridad en el Morocón.

“Es fundamental esa presencia militar y policial la cárcel, claro que se va a consultar con los pueblos. Ahora estamos en los temas de reconocimiento, pero se va a consultar con los pueblos y sus verdaderos líderes, no con líderes de la narcoactividad o con interesados en la narcoactividad porque los narcos tienen parientes y tienen nexos en todos lados”, expresó Moncada.

Detalló que son al menos cuatro redes de narcotráfico, por lo que es urgente construir una cárcel de máxima seguridad que permita aislar a esos grupos criminales que operan de manera deliberada en La Mosquitia.

“En esa zona de La Mosquitia operan como mínimo cuatro redes de narcotráfico, y esas redes tienen grados de oposición porque quieren seguir operando con las concesiones de las cuatro mil hectáreas”, dijo a medios de comunicación.

Insistió que La Mosquitia estuvo abandonada por más de 12 años y se concesionaron al menos 4 mil hectáreas de esa zona, pero eso fue anulado por el Gobierno de Xiomara de Zelaya.

“Ustedes, nosotros trabajamos día a día para tener acceso a ingresos y poder sostener nuestra familia, pagar la casa, pagar el carro los que todavía tenemos acceso a ello, pagar la mensualidad de la motocicleta mientras los criminales venden cada kilo de cocaína en 35 mil dólares en Estados Unidos y en 50 mil dólares en Europa”, sentenció Moncada.

Cerró diciendo que el crimen no tiene principio y no respeta nada, la lucha “está el pecho del soldado hondureño”. Asu vez que toca hacer presencia en los lugares más recónditos para eliminar el narcotráfico.

Por otro lado, habló del Tratado de Extradición dijo que, “la denuncia del Tratado de Extradición fue un ejercicio de soberanía frente a un ataque que pretendía remover de su sitio al General Roosevelt Hernández”.