Exhibición pública con desnudez y una muerte fueron acciones adoptadas ayer por pobladores que cobraron justicia por su cuenta contra señalados de cometer fechorías, en el departamento de El Paraíso y en las colonias Humuya y El Sitio en Tegucigalpa.
En uno de los casos, una víctima mató a una presunta asaltante tras arrollar la motocicleta en que se transportaba de copiloto en una solitaria calle en la colonia Humuya de Tegucigalpa.
La joven fue identificada como Katherine Estefanía Izaguirre Claros (34), originaria y residente en el barrio Reparto por Bajo en Tegucigalpa.
Este incidente ocurrió alrededor de las 2:00 de la tarde cuando la pareja, a bordo de una motocicleta, supuestamente intentó despojar de 200 mil lempiras al conductor de un vehículo a quien le daban seguimiento desde un banco entre la colonia Humuya y el bulevar Kuwait.
En una gasolinera de la Humuya el muchacho se disponía a abastecer el tanque de su automóvil, un carro tipo turismo color gris, cuando fue abordado por la pareja, entre amenazas de muerte con pistola automática.
Fue cuando el motorista frustró el malévolo plan acelerando su vehículo contra la motocicleta y sus ocupantes.
La fémina y su acompañante se pararon y comenzaron a correr, sin embargo, a unos cuantos metros de donde sucedió el atropellamiento, Izaguirre Claros, no pudo resistir las lesiones internas.
Su cuerpo aún con signos vitales quedó tendido en plena calle, según el reporte de policías que se trasladaron al lugar, pero expiró a los minutos, previo a la llegada de paramédicos de la Cruz Roja Hondureña.
Del conductor de la motocicleta no se sabe nada, ya que huyó del lugar a pie, pero investigadores tratan de identificarlo a través de la procedencia de la motocicleta.
Los agentes encontraron un casco de motociclista, un carné de estudiante con el nombre de “Josué David Varela Bueso” del Instituto Técnico Honduras, un cargador de pistola calibre 22 milímetros y la motocicleta abandonada. Personal de Medicina Forense del Ministerio Público (MP) se trasladó al sector capitalino, rodeado de curiosos para reconocer y levantar el cadáver de la dama.
