La vacuna Dengvaxia se ha convertido en una herramienta clave para proteger a los niños contra el dengue, una enfermedad que puede causar complicaciones graves y hospitalización.
La vacuna, segura y eficaz, brinda una protección duradera, pero solo está recomendada para niños de 9 a 16 años que hayan tenido una infección previa por dengue confirmada por laboratorio.
Esta medida es crucial para garantizar la seguridad de los pacientes, ya que vacunar a un niño que no ha tenido dengue puede aumentar el riesgo de enfermedad grave en caso de una futura infección.