La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) informó este miércoles que se mantiene la alerta amarilla en cinco departamentos del país y en los municipios aledaños al río Ulúa, debido a las fuertes lluvias y tormentas eléctricas que afectan gran parte del territorio nacional.
La medida preventiva busca reducir riesgos de desbordamientos de ríos, inundaciones y deslizamientos de tierra en zonas vulnerables, donde el nivel de saturación del suelo se mantiene elevado.
Al mismo tiempo, otras cinco regiones permanecen bajo alerta verde, que implica un nivel de riesgo menor, pero con el llamado a la población a mantenerse informada y tomar precauciones ante posibles crecidas de ríos y quebradas.
La institución explicó que la situación se debe a la presencia de una vaguada que continúa generando inestabilidad atmosférica sobre Honduras, provocando lluvias dispersas y tormentas eléctricas.
Copeco aseguró que el monitoreo será permanente y que, conforme las lluvias disminuyan, se procederá a reducir los niveles de alerta en las diferentes zonas del país.
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