El segundo debate presidencial entre el presidente Donald Trump y el candidato demócrata Joe Biden tendrá lugar virtualmente en medio de las consecuencias del diagnóstico presidencial de COVID-19.

La Comisión de Debates Presidenciales no partidista hizo el anuncio el jueves por la mañana, una semana antes de que los dos se enfrentaran en Miami, “con el fin de proteger la salud y seguridad de todos los involucrados en el segundo debate presidencial”.

Los candidatos “participarán desde ubicaciones remotas separadas” mientras que los participantes y el moderador permanecen en Miami, dijo la comisión.

El moderador del evento es el productor ejecutivo senior y editor político de C-SPAN Networks Steve Scully.

Trump fue diagnosticado con el coronavirus hace una semana y, en un tuit del martes afirmó que esperaba con ansias debatir con Biden en el escenario de Miami: “¡Será genial!” tuiteó.

Biden, por su parte, indicó que él y Trump “no deberían tener un debate” mientras el presidente siga siendo positivo a COVID. Biden señaló a los reporteros en Pensilvania que estaba “esperando poder debatirlo”, pero añadió que “tendremos que seguir pautas muy estrictas”.

Trump enfermó de virus el jueves pasado, solo 48 horas después de debatir sobre Biden en persona por primera vez en Cleveland. Si bien los dos candidatos permanecieron separados durante el cara a cara, el contagio de Trump provocó preocupaciones de salud para Biden y lo envió a someterse a múltiples pruebas de Covid-19 antes de regresar a la campaña electoral.