Una investigación realizada por el BID y presentada en documental ofrece una mirada a los entramados urbanos latinoamericanos y cómo la ubicación y el tipo de vivienda de los ciudadanos del continente guarda estrecha relación con las enfermedades que pueden padecer y las expectativas de vida.
La ubicación de una vivienda en Latinoamérica según el código postal puede predecir la expectativa de vida de sus habitantes; ciudades como Bogotá, San Salvador, Lima, Ciudad de México, Santiago de Chile o Buenos Aires por mencionar algunas indican riesgos diferenciales para la salud y por ende marcan las expectativas de vida, las que pueden variar de hasta por más de una década.
Los estratos sociales y las formas en que se fueron desarrollando las urbes latinoamericanas ofrecen para algunos espacios idóneos para tener una calidad de vida superior, pero para otros en las periferias, sin servicios básicos y viviendas en condiciones mínimas como -la gran mayoría- las condiciones son adversas. Esta población también debe sortear kilométricas travesías durante horas de transporte público para poder llegar al trabajo en la ciudad.