El FBI arrestó a dos personas por acusaciones de que ayudaron a operar una estación de policía ilegal para el gobierno de China en el bajo Manhattan, según señaló un par de altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.

 

Lu Jianwang, de 61 años, y Chen Jinping, de 59, se enfrentan a cargos por conspirar para actuar como agentes del Gobierno de China sin informar a las autoridades estadounidenses y por obstruir la justicia.

 

El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha estado buscando con ahínco pruebas de lo que llama «represión transnacional» de adversarios del país, como China e Irán, que estarían intimidando opositores que viven en Estados Unidos.

«No podemos tolerar y no toleraremos la persecución del Gobierno chino contra activistas prodemócratas que han buscado refugio en este país», afirmó ante la prensa Breon Peace, fiscal federal de Brooklyn.

 

Los fiscales desvelaron este lunes 17 de abril los cargos contra 34 oficiales chinos por operar presuntamente una «granja de trolls» con el objetivo de acosar a disidentes del Gobierno en línea.

 

Todos los funcionarios acusados están en paradero desconocido.

Lu y Chen son ambos ciudadanos estadounidenses que dirigen una organización sin ánimo de lucro que describe su función como un lugar de encuentro para migrantes de la provincia china de Fujian, según los fiscales.

 

En 2018, Lu trató de persuadir a un individuo considerado fugitivo en China de regresar a su casa, de nuevo según los fiscales estadounidenses. En 2022, ayudó a abrir esta presunta «oficina de policía» y recibió la petición del Gobierno chino de encontrar a una persona que vivía en California y que era considerado activista prodemocracia.

 

La investigación estadounidense aseguró que Lu y Chen admitieron ante el FBI haber borrado sus comunicaciones con un funcionario chino. También detalla que esta estación policial escondida cerró en el otoño de 2022.