Según la Fiscalía Especial para el Enjuiciamiento de Funcionarios y Servidores de la Seguridad Pública (UF-ADPOL), la investigación demostró que durante su gestión como Jefe Departamental de la Policía en Choluteca, Mejía Tinoco y otros agentes presuntamente cobraban sobornos a transportistas de ganado para permitirles circular sin inconvenientes.

Los pagos se realizaban en efectivo y se entregaban en diferentes puntos de control como Pavana, El Triunfo y Namasigüe, e incluso en las instalaciones de la Asociación de Ganaderos de Choluteca (AGACH).

Las autoridades señalan que, a partir de la llegada de Mejía Tinoco al cargo, se organizó una red delictiva que involucraba a miembros de la Unidad Departamental de Prevención (UDEP) y de la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI). En esta trama también participaron seis policías activos y tres que fueron depurados, quienes enfrentan cargos por asociación ilícita y cohecho.

Caso Oquelí Mejía

El caso ha avanzado con la extinción definitiva del dominio sobre bienes de Mejía Tinoco y su esposa, Wendy María Castro. En junio de 2023, el Ministerio Público, con apoyo de laAgencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), logró que se confiscaran dos viviendas, dos vehículos y 13 cuentas bancarias a su nombre.