El comisionado presidencial para el Centro de Gobierno encargado, Leopoldo López, aseguró este viernes que el mecanismo de protestas en la calle no está agotado en Venezuela, además, aseguró que pronto podría iniciar “un nuevo ciclo de protestas” en el país caribeño.
En entrevista para la cadena de noticias CNN, López dijo que “los procesos de calle son cíclicos” y no deben ser descartados, pero que en esta oportunidad deberían venir acompañados de otros mecanismos de presión contra Nicolás Maduro.
“Nos toca volver a construir un ciclo de calle. No es el único componente, pero es necesario. Creo y apoyo que tenemos que impulsar un nuevo ciclo de protestas”, aseguró López desde el exilio en Madrid.
Asimismo, el fundador del partido político Voluntad Popular, señaló que a pesar de las “fraudulentas” elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre, Juan Guaidó deberá mantenerse como presidente encargado de Venezuela.
Cuando ya falta casi un mes para que se realicen los comicios parlamentarios, en los que no participará la oposición, López aseguró que el desconocimiento de este proceso será mayor al de las elecciones del 2018.
“Nadie va a reconocer la elección fraudulenta. Eso dejará un vacío, no va a haber una sustitución legítima de la Asamblea Nacional. En consecuencia, tiene que continuar el mandato”, dijo el dirigente.
Leopoldo López destacó que el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, tiene “muy claro cual es su posición en todo este proceso”, que se trata de lograr la materialización de unas elecciones presidenciales justas.
El dirigente opositor detalló que para lograr el cambio político en el país, la sociedad civil y los sectores democráticos en Venezuela deben trabajar en “unidad” como valor fundamental.
López fue consultado a propósito de los motivos por los cuales fracasó la movilización del 30 de abril de 2019, también conocida como “Operación Libertad” en la que grupos militares y sectores políticos se posicionaron en la base de La Carlota en Caracas, para desconocer a Nicolás Maduro.
Para el líder de VP, Maikel Moreno, presidente del ilegítimo Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de la dictadura de Maduro, fue el elemento clave para que ese día no se concretara un cambio del poder en Miraflores.
“Maikel Moreno venía trabajando con nosotros en una sentencia que desmantelaba la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), desconocía las elecciones presidenciales del 2018 y convocaba a nuevas elecciones presidenciales. Esa sentencia existe y se redactó, Moreno se comprometió a publicarla el 30 de abril”, reconoció López.
El dirigente aseguró que el ministro de defensa de la dictadura, Vladimir Padrino López “estaba perfectamente al tanto” de lo que ocurriría, pero fue Moreno quien “no cumplió”, aunque dijo desconocer las razones.
El comisionado del Gobierno interino develó que, de haberse concretarse la operación, Juan Guaidó hubiera presidido un Consejo de Estado, que iba a tener una duración de 9 a 12 meses mientras se organizaba una elección presidencial en Venezuela.
(Infobae)
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