Llenos de gratitud feligreses honran a la Virgen de Suyapa

Con agradecimiento profundo en su corazón, la fiel católica, Lorencia Argentina Cabrera, de 70 años de edad, viajó ayer desde su natal aldea La Sabana, cabecera departamental de Comayagua, para cumplirle una promesa a la Virgen de Suyapa, por haber apartado a su hijo de las drogas y bendecirlo con el milagro de darle una digna familia.

Igual que la longeva creyente, el fin de semana pasado, centenares de hondureños acudieron a la Basílica de Suyapa, en Tegucigalpa, para venerar a la Virgen de Suyapa e iniciar con los festejos por el 278 aniversario del hallazgo de la patrona de Honduras.

En honor al hallazgo de “La Morenita”, desde el sábado anterior inició la novena con actos litúrgicos en los que participaron miles de feligreses y que finalizarán el próximo 2 de febrero, con la tradicional alborada.

Los honores comenzaron el fin de semana, cuando bajo custodia de las Fuerzas Armadas y la feligresía católica, la imagen original de la Virgen de Suyapa peregrinó por las calles de Tegucigalpa.

La ruta de la peregrinación fue desde la Catedral Metropolitana San Miguel Arcángel, en el centro de la ciudad, hasta su casa, la Basílica Menor Nuestra Señora de Suyapa, en la aldea Suyapa.

Ayer, en el segundo día de la novena, los oficios religiosos continuaron en la Basílica de Suyapa, con la celebración de varias misas en distintos horarios, en las iglesias San Judas Tadeo y en el Santuario Pequeño, siempre al oriente de la capital.

Decenas de hondureños de distintas partes del país se hicieron presentes en la celebración de una eucaristía solemne a la Virgen de Suyapa, desarrollada a las 4:00 de la tarde.

Ya son centenares de devotos los que han visitado la Basílica de Suyapa y La Ermita, para participar de la novena en honor a la señora de Suyapa, conmemorando 275 años de su hallazgo.

Desde los lugares más recónditos del país, miles de fieles ya encaminaron su peregrinaje para cumplir sus promesas y decirle gracias a la Virgen de Suyapa, por haber cumplido sus milagros.