Nuevos indicadores económicos revelados por el gobierno chino dibujan un panorama de una economía que todavía está luchando por encontrar su equilibrio tras la pandemia de COVID-19, a pesar de que superó el modesto objetivo de crecimiento establecido por el gobierno central.
Según datos publicados el miércoles por la Oficina Nacional de Estadísticas, la economía china creció un 5,2 % en 2023. Sin embargo, el mismo informe revela que el país todavía sufre una deflación persistente, una crisis continua en su mercado inmobiliario, un alto desempleo juvenil y una disminución demográfica a largo plazo.