Las atenciones de casos que requieren de tratamiento psicológico en Honduras se han duplicado en el último año, pasando de 2,215 en 2022 a 4,430 en el 2023, alertó la Organización No Gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF).
Honduras no cuenta con suficientes recursos en salud mental para atender a la población ni servicios para emergencias psiquiátricas. Solamente en la región de Cortés -norte de Honduras- se cuenta con tres psicólogos asistenciales para el sistema público, según el informe.
Es por ello que, desde hace varios años, MSF en Honduras se ha comprometido con mejorar el acceso de estos servicios a la población. Los equipos se han enfocado en el abordaje de primera ayuda psicológica y el seguimiento de pacientes.
Una de las estrategias del proyecto de MSF en San Pedro Sula y Choloma es reducir las brechas de acceso a la salud mental a través del programa mhGAP, por sus siglas en inglés. Se trata de una herramienta desarrollada por la Organización Mundial de la Salud que consiste en la capacitación, acompañamiento y supervisión clínica de personal médico, para ayudar a identificar y manejar casos de salud mental, con intervenciones psicosociales y la prescripción de medicamentos. En el último año, el equipo de MSF capacitó a 15 profesionales de la medicina y enfermería en ocho centros de salud pública de la zona.
La doctora Sara Donaire, médica general del centro de salud de La Bueso, en el municipio de Choloma, señala que estas formaciones con el programa mhGAP les han permitido indagar un poco más en la historia del paciente y basarse únicamente en el diagnóstico. El equipo de MSF, integrado por cuatro psicólogos, trabaja con el personal sanitario en la promoción de los servicios de salud mental y en el abordaje psicoterapéutico y farmacológico a pacientes.