Para muchas personas, tener acceso a un baño limpio y seguro es algo cotidiano. Sin embargo, para miles de hondureños, esta realidad aún está fuera de su alcance. En zonas rurales como Chinda y San Antonio de Cortés, la falta de agua potable y saneamiento sigue siendo un desafío diario. En este contexto, una simple cosa como un baño puede hacer toda la diferencia.
Sin embargo, gracias a la iniciativa “Baños Cambian Vidas”, impulsada por Walmart y Kimberly-Clark, ha cambiado la vida de más de 210 mil personas en Honduras.
Generando cambios
En el país, esta alianza ha marcado una diferencia significativa a lo largo de ocho años. En colaboración con la ONG Water For People, el programa ha beneficiado a más de 210 mil personas mediante la autoconstrucción de sistemas de agua y saneamiento sostenibles.
Como resultado este 2024, más de 63 mil hondureños se beneficiarán con la construcción de nuevos sistemas de agua, en comunidades como Chinda, El Negrito y San Antonio de Cortés, y aunque hablar de cifras siempre es importante, detrás de cada número hay una historia y una familia.
“No se trata solo de construir baños; se trata de devolverles dignidad a las personas. La higiene no es un lujo, es un derecho básico y cuando lo tienes, cambia todo en tu vida”, comenta Eduardo Nieto, gerente de Kimberly-Clark C.A.
El programa, además ha logrado crear sistemas comunitarios de agua sostenibles y estaciones de lavado de manos en 45 escuelas, donde los niños aprenden desde pequeños la importancia del lavado de manos. Un gesto tan sencillo que, sin embargo, puede prevenir enfermedades y salvar vidas.
Lynda Marín, subgerente de Asuntos Corporativos de Walmart Honduras, comparte esta visión y extiende una invitación: “En nuestras más de 110 tiendas en todo el país, queremos que nuestros clientes conozcan esta iniciativa. Con la compra de productos Scott® pueden ser parte de este cambio, un cambio que ayuda a las familias a vivir mejor”.
