Las fiestas patrias más que una jornada cívica, que todos los gobiernos impulsan, con el apoyo de las instituciones educativas, privadas y públicas, se convierten en una oportunidad de hacer negocio para los profesionales de oficios que durante todo el año pasan “muertos” porque la demanda es escasa. Tal es el caso de los fabricantes de calzado, cuyo negocio como tantos otros, son un sacrificio.
Sin embargo, ahora que se aproximan los desfiles, decenas de zapateros no alcanzan a cumplir con la demanda de pedidos, especialmente, de las famosas botas que calzan las palillonas que engalanan las fiestas patrias. En la séptima avenida de Comayagüela, conocida como la zona de los zapateros, la demanda es una ola gigantesca, que tiene felices a los este oficio, porque solo en esta temporada, aunque no duerman, el trabajo les permite superar sus problemas económicos, que los asfixian el resto del año.
Beijing, julio 2025 — En el marco del Seminario de Exploración y Práctica de la Modernización al… Leer más
Un incendio de gran magnitud arrasó con una reconocida cafetería ubicada en el barrio San… Leer más
El secretario de Relaciones Exteriores, Javier Bu, recibió las Copias de Estilo de Marco Díaz,… Leer más
El Hospital General San Felipe suspendió este viernes las cirugías selectivas en el área de… Leer más
Una nueva tragedia enluta a Honduras. Este viernes, tres miembros de una misma familia fueron brutalmente… Leer más
El jefe de bancada nacionalista, Tomás Zambrano, argumentó que acompañarán y respaldarán al Partido Liberal… Leer más