Al menos 28 personas murieron por el paso de la feroz tormenta Julia en Centroamérica, mientras siguen las tareas de rescate y reconstrucción en los distintos países afectados. Según las últimas estimaciones, 14 de las víctimas fatales son de Guatemala, cuatro de Honduras y nueve de El Salvador.
Julia, degradado en las últimas horas a depresión tropical, dejó una estela de destrucción y miles de personas en varios países centroamericanos desde que tocó tierra en Nicaragua el domingo pasado.
En la localidad guatemalteca de Panzós Alta Verapaz, en el centro norte del país, murieron cinco personas al quedar sepultadas por un alud de tierra tras el desprendimiento de una ladera sobre sus casas.
En El Salvador, Julia tocó tierra el domingo con fuertes aguaceros y vientos sostenidos de 70 kilómetros por hora que provocaron el desbordamiento de ríos, la caída de árboles en las carreteras y dejaron las calles de las ciudades inundadas.
En Honduras, el director de Preparación y Respuesta de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) declaró que el huracán Julia dejó cuatro personas muertas y al menos 9.200 personas refugiadas en todo el país.
A su paso por Nicaragua, Julia dejó sin electricidad e internet a más de un millón de personas y provocó daños materiales, según informó la vicepresidenta del país, Rosario Murillo.
En la mayoría de los países afectados, el paso de Julia motivó cierres de carreteras y la suspensión del curso lectivo en todo el país, como fue el caso de Costa Rica, Panamá, Guatemala y El Salvador.