El presidente de Argentina, Alberto Fernández, pidió este lunes el fin de los bloqueos económicos que producen un «agobio» a Cuba, país donde se registraron masivas protestas ciudadanas este domingo.
«No conozco exactamente la dimensión del problema de Cuba. Lo que sí tengo claro, como bien dijo el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, es que, si realmente nos preocupa humanitariamente Cuba, terminemos con los bloqueos», dijo Fernández.
En declaraciones radiales, el jefe de Estado argentino sostuvo que esos bloqueos «le están haciendo un daño incalculable» a Cuba «y también a Venezuela».
«Mantener bloqueos es lo menos humanitario»
Fernández recordó que en las últimas reuniones del G20 pidió «el fin de los bloqueos en el mundo» porque «cuando bloquean a un país, lo que hacen es bloquear a una sociedad y el que padece no es un gobierno sino una sociedad».
«La verdad es que, en medio de una pandemia, mantener bloqueos es lo menos humanitario que existe», aseveró el mandatario argentino en declaraciones a Radio 10, de Buenos Aires.
Fernández insistió en que «si un pueblo está agobiado económicamente por un bloqueo y viene una pandemia, el agobio de ese pueblo va a aumentar sin ninguna duda».
Consultado sobre las demandas expresadas en las protestas registradas este domingo en Cuba, Fernández sostuvo que «todas esas cosas son problemas que tienen que resolver los pueblos».
«No soy yo quien debe decirle a los pueblos qué tienen que hacer. No es ni Argentina ni ningún país del mundo el que dice lo que tiene que hacer. No creo que ese sea el método. Nosotros sí tenemos que favorecer la paz de los pueblos y que los pueblos encuentren el diálogo y los caminos de salida. Eso es lo que siempre he planteado sobre Venezuela», afirmó.
Protestas contra el gobierno cubano
Este domingo, miles de cubanos salieron a las calles a protestar contra el gobierno al grito de «¡libertad!», en una jornada inédita que se saldó con cientos de detenidos y enfrentamientos después de que el presidente Miguel Díaz-Canel conminara a sus partidarios a salir a enfrentar a los manifestantes.
Las protestas, las más fuertes que han ocurrido en Cuba desde el llamado «maleconazo» de agosto de 1994, se producen con el país sumido en una grave crisis económica y sanitaria, con la pandemia fuera de control y una fuerte escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos, además de largos cortes de electricidad.
(EFE)