Ciudad del Vaticano.- El papa defendió hoy que la Iglesia debe “redescubrir su rostro femenino” y el mundo tomar como referencia a las madres “para encontrar la paz”, durante la misa del Año Nuevo, avisando que “quien lastima a una mujer, profana a Dios”.
“La Iglesia necesita de María para redescubrir su propio rostro femenino, para asemejarse más a ella que, como mujer, Virgen y Madre, representa su modelo y su figura perfecta; para dar espacio a las mujeres y para ser generativa a través de una pastoral hecha de cuidado y solicitud, de paciencia y valentía materna”, sostuvo.
El papa ensalza el papel de María en la Iglesia
El pontífice abrió el año con una misa en la basílica de San Pedro dedicada a la Virgen, centrando su homilía en ensalzar el papel de María en la Iglesia, amparándose en las Escrituras y en la encíclica “Lumen Gentium” (1964) que Pablo VI escribió en el revolucionario Concilio Vaticano II, pero también en la vida civil del planeta.
“También el mundo necesita mirar a las madres y a las mujeres para encontrar la paz, para escapar de las espirales de violencia y odio, y volver a tener miradas humanas y corazones que ven”, puntualizó.
“Quien lastima a una sola mujer profana a Dios”
Francisco explicó, ante la plana mayor de la Curia Romana y otras autoridades y fieles congregados en el templo, que “toda sociedad necesita acoger el don de la mujer, de cada mujer, respetarla, cuidarla, valorar”.
Porque, aseveró, “quien lastima a una sola mujer profana a Dios, nacido de mujer”, de María.
“Nuestro tiempo, vacío de paz, necesita de una Madre que vuelva a reunir a la familia humana. Miremos a María para ser constructores de unidad”, instó el pontífice.