Con ataques aéreos Israel mató en la madrugada de este jueves 11 de mayo al jefe de la fuerza de cohetes de la Yihad Islámica. Es el cuarto líder del movimiento fallecido en una serie de “asesinatos selectivos”, iniciados el pasado martes por la mañana por el Ejército israelí, y que hasta el momento deja al menos 25 palestinos muertos, incluidos cinco niños. La agrupación islamista respondió con centenares de cohetes disparados desde Gaza contra poblaciones israelíes.
Ali Ghali es el nombre del jefe de la Yihad Islámica que murió en un ataque contra la vivienda en la que se encontraba este jueves 11 de mayo. De acuerdo con el Ejército israelí, el hombre ayudaba a supervisar el lanzamiento de cohetes, que se ha convertido en la principal técnica de ataque de las milicias armadas palestinas contra asentamientos judíos.
El brazo armado de la Yihad, las Brigadas Al-Quds, confirmaron la muerte del militante. «Ali Ghali fue asesinado en el sur de la Franja de Gaza junto con otros mártires», señaló.
El Ejército israelí aseguró que los otros dos muertos en el ataque también eran miembros de la Yihad. Sin embargo, los medios de comunicación palestinos informaron que se trataba del hermano y el sobrino de Ghali.
Las fuerzas israelíes confirmaron que aviones de combate apuntaron contra Ghali mientras se escondía «en un apartamento en Khan Younis», el segundo centro urbano del empobrecido enclave palestino.
