A pocos días de la Caminata por la Paz y la Democracia, convocada por las iglesias católica y evangélica, aparecieron este martes en varios puntos de la capital pancartas que rechazan la movilización, intensificando la confrontación entre líderes religiosos y sectores afines al gobierno.
Colocaron una de las pancartas en el puente peatonal frente a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y otra sobre el bulevar Centroamérica.
Ambas muestran al arzobispo de Tegucigalpa, Vicente Nácher Tatay, y al pastor Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica, con el mensaje: “Rechazamos el uso de nuestra fe con fines políticos proselitistas”.
Estos carteles se suman a campañas de desprestigio similares a las emprendidas recientemente contra periodistas y otros sectores críticos.
La caminata, prevista para el sábado 16 de agosto, contará con delegaciones de más de 40 municipios de los 18 departamentos. Los organizadores insisten en que el objetivo es orar por la paz, la democracia y la unidad nacional, sin ningún fin político, por lo que pidieron a los políticos no asistir.
Pese a las pancartas y amenazas directas, obispos, pastores y feligreses ratificaron que la actividad se realizará. “Estamos listos para orar por Honduras, y lo haremos con alegría”, afirmaron líderes de ambas iglesias.