En vísperas del segundo invierno en guerra, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, advirtió a sus ciudadanos sobre una posible embestida bélica por parte de Moscú en las próximas semanas. Entretanto, aliados de Kiev siguen comprometidos con el suministro de armas para las fuerzas ucranianas, mientras que el Gobierno de Alemania anunció que busca duplicar su apoyo financiero para Ucrania en 2024.
Ucrania debe «prepararse» para los ataques rusos contra las infraestructuras del país este invierno, advirtió este domingo 12 de noviembre el presidente Volodímir Zelenski.
«Debemos prepararnos para la posibilidad de que el enemigo aumente el número de ataques con drones o misiles contra nuestras infraestructuras», dijo el jefe de Estado en su discurso diario.
Las palabras de alerta del mandatario llegan después de que la inteligencia militar ucraniana mencionará que una explosión habría acabado con la vida de al menos tres soldados rusos en la ciudad sureña ocupada Melitopol. Atribuyeron el ataque a un «acto de venganza» de la resistencia local.
El año pasado, los bombardeos sistemáticos del Ejército ruso contra la red energética ucraniana privaron a miles de personas de calefacción o electricidad durante largos períodos, con temperaturas bajo cero.
Kiev afirma haber fortalecido sus defensas para proteger la infraestructura clave.
«El escudo aéreo ucraniano ya es más fuerte que el año pasado», aseguró Zelenski.
Ucrania ha recibido importantes sistemas de defensa aérea de sus aliados occidentales, en particular ‘Patriots’ fabricados en Estados Unidos.
La declaración coincide con la llegada a Estados Unidos, el domingo, de una delegación ucraniana, compuesta entre otros por el jefe de gabinete de Zelenski, Andriy Yermak, y encabezada por la ministra de Economía, Yulia Svyrydenko, para discutir la cooperación y el apoyo a su país en guerra.
