En Myanmar, desde el golpe militar de febrero de 2021, miembros de la minoría cristiana chin han tomado las armas para defender su territorio, su identidad y sus ideales frente a la junta que gobierna el país.

Lejos de los reflectores, en las montañas del oeste de Myanmar se libra una guerra que afecta a los civiles. Allí, la minoría chin resiste contra la junta militar que gobierna el país.

En las montañas fronterizas con India, han instalado un campo de entrenamiento para formar un Ejército de resistencia. Muchos son jóvenes que han abandonado sus trabajos y sus estudios para tomar las armas y defender sus creencias e ideales.

Sin embargo, la hazaña está lejos de ser fácil. La junta militar busca acabar con la resistencia y hacer valer su control sobre el territorio.

En el centro se encuentra la población civil que recibe los bombardeos aéreos de la junta y muchos se han visto obligados a dejar para siempre sus hogares.