Poco antes de que un niño de seis años le disparara a su maestra en Virginia, no hubo pelea, ni lucha física ni advertencia, dijeron las autoridades.
“Lo que sabemos por ahora es que ella estaba dando su clase. Él sacó el arma de fuego, le apuntó a la maestra y le disparó una vez”, declaró el lunes el jefe de policía.
La corta edad del sospechoso ha añadido un giro inesperado a un escenario trágico de por sí. El caso ha obligado a los líderes locales, la policía y los expertos en violencia armada a enfrentarse con una pregunta aterradora: ¿Qué sucede cuando un niño de primer grado le dispara a alguien?
Legalmente, las autoridades se encuentran en un territorio desconocido. La ley de Virginia prohíbe acusar a un niño de 6 años como adulto.
El estudiante podría ser acusado en un tribunal de menores, pero la edad mínima para una sentencia de prisión juvenil es de 11.