El Gobierno tailandés prohibió las protestas y la policía detuvo al menos a tres líderes de las mismas el jueves ante la escalada de las manifestaciones contra el rey, Maha Vajiralongkorn, y el primer ministro, Prayuth Chan-ocha, antiguo jefe de la junta.

 

A los 30 minutos de las órdenes de emergencia, justificadas en parte por la perturbación de un convoy real, la policía antidisturbios expulsó a los manifestantes que habían acampado frente a las oficinas de Prayuth para exigir su destitución y una nueva constitución.

“La situación actual equivale a un golpe de Estado”, dijo Tattep Ruangprapaikitseree, uno de los pocos líderes de las protestas que todavía está libre.

La policía dijo que había arrestado a más de 20 personas por negarse a cooperar con los agentes que despejaron la zona de la protesta. Entre los arrestados se encontraban dos de los críticos más elocuentes de la monarquía. Otro más fue detenido más tarde.

La policía dijo que se establecerían puntos de control en Bangkok en coordinación con el ejército para impedir que los manifestantes se reúnan.

“Si hay una violación, se aplicará la ley “, dijo el portavoz de la policía Yingyot Thepchamnong en una conferencia de prensa.

Tres meses de protestas han sido en gran parte pacíficas, como lo fue la marcha de decenas de miles de personas el miércoles. Pero en un incidente, la policía alejó a empujones a manifestantes durante un convoy en el que iba la reina Suthida.

Esto fue empleado como pretexto para unas medidas de emergencia que incluyen la prohibición de reuniones de cinco o más personas. También se ha prohibido la publicación de noticias o información en internet que pueda “causar miedo” o “afectar a la seguridad nacional”.

“Es extremadamente necesario introducir una medida urgente para poner fin a esta situación de manera efectiva y rápida a fin de mantener la paz y el orden”, dijo el Gobierno en la orden.

Otras razones para la adopción de medidas de emergencia fueron los daños causados a la economía por las protestas y el riesgo de propagación del nuevo coronavirus, del que sólo se ha notificado un caso de transmisión local en más de cuatro meses.

Kobsidthi Silpachai, jefe de análisis de mercados de capital en Kasikornbank, dijo que los recientes acontecimientos políticos estaban “crispando los nervios de los inversores”.

La Bolsa de Bangkok cayó un 1,4% el jueves, mientras que en el mercado de divisas el baht mostró pocas variaciones.