Corea del Norte lanzó un cohete que buscaba instalar un satélite de espionaje militar, pero este tuvo problemas poco después del despegue, meses después de que otro artefacto fuera a dar al océano tras el lanzamiento. El operativo, aunque fracasó, encendió las alarmas del Indo Pacífico que experimenta una constante tensión entre sus vecinos. Pyongyang dijo que intentará un tercer lanzamiento en octubre.
Por una falla en el «sistema de ignición de emergencia del cohete», Corea del Norte fracasó este 23 de agosto (24 de agosto hora local) en su intento de instalar un satélite espía.
Pyongyang realizó el lanzamiento horas antes del amanecer de este miércoles, tras haber anunciado días antes un plazo de ocho días para hacerlo. La agencia local de noticias KCNA dio detalles de lo ocurrido: “Los vuelos de la primera y segunda etapa del cohete fueron normales, pero el lanzamiento falló debido a un error en el sistema de ignición de emergencia durante el vuelo de la tercera etapa”.
El lanzamiento prendió las alarmas en la región. Corea del Sur aseguró haber rastreado el vuelo desde su lanzamiento en el Centro de Lanzamiento de Satélites Sohae del Norte. A su vez, Seúl considero el lanzamiento como una provocación y una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, que especifican la prohibición del uso de tecnologías de misiles balísticos implementadas por la parte del Norte. Además, definieron el lanzamiento como un «fracaso».
En Japón, el lanzamiento hizo que el país emitiera una advertencia de emergencia a través del sistema de transmisión J-alert. En ella, le solicitaban a los habitantes de la prefectura japonesa de Okinawa permanecer en sus casas ante una posible amenaza balística. Horas después de la emisión de la alerta, el Gobierno japonés, en un aviso, informó que el misil había cruzado el océano Pacífico y por ello levantó la alerta de emergencia.
Fuente: France 24