Milei será, según sus propias palabras, el primer presidente anarcocapitalista del país y posiblemente del mundo. Fue elegido con gran apoyo popular. En la segunda vuelta del 19 de noviembre ganó por 11 puntos de diferencia: más de 14 millones de argentinos lo eligieron. Sus promesas fueron grandilocuentes: gran recorte presupuestario, dolarización y cierre del banco central, entre otras.
Todo indica que el comienzo de su gestión pueda ser al menos algo más modesta, aunque se mencionan un paquete de múltiples leyes, una reforma del Estado y un ajuste del gasto.
Sin embargo, la legitimidad de las urnas no ofrece gobernabilidad automática. Requiere también respaldo institucional y político –o al menos cierto margen de maniobra– de legisladores, gobernadores, sindicatos y movimientos sociales. Milei no tiene gobernadores de su propia fuerza, La Libertad Avanza. Y en el Congreso no llega a tener primera minoría, ni en el Senado ni en Diputados.
Primero, en cualquier caso, debe asumir el cargo y hablar por primera vez como Presidente.
Eso ocurrirá el domingo 10 de diciembre, cuando Javier Milei iniciará sus cuatro años como presidente de Argentina, luego de que se lleve a cabo el acto de traspaso de mando, que tendrá lugar en el Congreso, en torno al mediodía, hora de Buenos Aires.
Comienza la era Milei
La tradición marca que una vez recibidas la banda y el bastón presidencial, el mandatario dirija unas palabras a la Asamblea Legislativa. Sin embargo, es posible que Milei hable solo del lado exterior, en la explanada del palacio legislativo, frente a sus seguidores, a quienes él mismo convocó por redes sociales.
Como parte de la agenda del día, que también incluye una ceremonia interreligiosa en la Catedral de Buenos Aires y una gala en el Teatro Colón, el presidente se dirigirá a la Casa Rosada desde el Congreso. Allí recibirá a las delegaciones extranjeras, que incluyen mandatarios extranjeros y otros invitados. Estarán, entre otros, el mandatario ucraniano Volodímir Zelenski, el rey de España, Felipe VI, el jefe de Estado de Chile Gabriel Boric y el primer ministro húngaro Viktor Orbán.
No estará presente Luiz Inacio Lula da Silva, presidente del principal socio comercial de Argentina, Brasil, a quien Milei dirigió duras palabras durante la campaña. En cambio, el gigante sudamericano enviará otros representantes de su Gobierno. Lo mismo hará Joe Biden, presidente de Estados Unidos, país con el que Milei quiere fomentar una relación de más cercanía –al igual que con Israel– que con el resto del mundo, según aseguró. Sí participarán de los actos de asunción el expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el líder del partido de derecha español Vox, Santiago Abascal.
Se espera que en su discurso del domingo Milei de cuenta de la situación del país, una suerte de advertencia de que, debido a la crisis en que está la nación, cualquier eventual mejora demandará tiempo.
También está previsto que el mismo domingo el nuevo mandatario esboce sus políticas centrales y, a partir de allí, empiece a definir sus detalles y qué leyes enviará primero para que trate el Congreso en las sesiones extraordinarias que anunció que convocará y qué medidas tomará en las primeras horas y días de gobierno.
Por lo pronto, ya está definida prácticamente la totalidad del gabinete y funcionarios de primera línea que tendrá la estructura del Ejecutivo bajo el mandato de Milei, que en principio contará con ocho ministerios, aunque está en estudio que Salud quede por fuera de Capital Humano, con una cartera propia.
Economía, el crucial Ministerio en medio de la crisis en Argentina
El lugar más importante en la actual situación del país, el Ministerio de Economía, será para Luis Caputo, que ocupó la Secretaría y el Ministerio de Finanzas y la Presidencia del Banco Central durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019). Su experiencia y formación en el área financiera es el perfil que Milei privilegió de cara a las medidas iniciales que prevé implementar su Administración.
Estos han sido días de muchas idas y vueltas informativas, especulaciones y versiones. La incertidumbre de cara al domingo y el inicio de una gestión inédita para el país hace que se conjugue una actitud expectante con una posición de cautela y espera: hasta que no se conozcan las medidas específicas que se vayan a implementar es difícil tomar decisiones.
En lo inmediato, se han informado aumentos en diversos sectores de la economía, especialmente en alimentos, el que más impacta en la inflación, con más de una remarcación por semana en el caso de algunos productos.
Las variables que estarán en la mira de los consumidores, los empresarios y los especialistas serán varias, pero fundamentalmente la inflación y el precio del dólar.
Milei ya advirtió que serán varios meses difíciles, de estanflación, en los que la situación podría empeorar severamente para vastos sectores de la población. Hoy la inflación es muy alta, pero el desempleo es relativamente bajo. Si los precios se aceleran aún más y ese fenómeno se conjuga con una caída en el empleo, los hogares tendrán graves dificultades para enfrentar los gastos de su vida diaria.
– France 24