Miles de polacos salieron este viernes (23.10.2020) a las calles de distintas ciudades del país en contra de la sentencia del Tribunal Constitucional contraria al aborto por malformación del feto, una de las pocas opciones para una interrupción legal del embarazo en ese país.
En Varsovia, la marcha discurrió de nuevo hacia las inmediaciones del domicilio del líder del ultraconservador partido gubernamental Ley y Justicia (PiS) y viceprimer ministro, Jaroslaw Kaczynski. Asimismo hubo concentraciones cerca de la sede del Constitucional.
Las autoridades de Varsovia ordenaron el despliegue de un fuerte dispositivo policial, después de los disturbios registrados el jueves en ambos puntos, así como en la sede del PiS, donde fueron detenidas quince personas por alteración del orden público.
Duda defiende decisión judicial
Las protestas arrancaron poco después de conocerse la sentencia del Constitucional, que aguardaban con expectación tanto los colectivos antiabortistas provida, por un lado, como organizaciones a favor del embarazo legal y representantes de la oposición liberal, por el otro.
El presidente polaco, Andrzej Duda, cercano al PiS, defendió este viernes la decisión del Constitucional en declaraciones, mientras fuentes de la Conferencia Episcopal la han calificado de acorde con un país de población mayoritariamente católica.
Posibilidades de aborto reducidas
El detonante de las movilizaciones fue la sentencia ayer del Tribunal que declaró inconstitucional la interrupción del embarazo por malformación del feto. Con ello, la posibilidad del aborto legal ha quedado reducida a los supuestos legales de violación, incesto y grave riesgo para la salud de la madre.
El tribunal respondía así a la demanda presentada hacer tres años por un grupo de parlamentarios del PiS, el partido de Kaczynski y la principal formación del gobierno polaco.
Los demandantes consideraban que el aborto por malformación del feto es una forma de eugenesia que no respeta la dignidad humana y, por lo tanto, no podía tener cabida en la Constitución.
Polémica por separación de poderes
La sentencia ahonda ahora la polémica en torno al poder judicial polaco, fuertemente cuestionado a raíz de la reforma impulsada por el PiS, que tanto la oposición polaca como la Comisión Europea (CE) consideran atentatoria contra la separación de poderes.
Bruselas ha abierto un proceso sancionador por considerar que esa reforma erosiona la independencia del poder judicial. Al frente del tribunal ha quedado la juez Julia Przylebska, en el por nominación del PiS.
Polonia es uno de los países de la Unión Europea (UE) donde más restrictivo es el derecho al aborto. La Ley de planificación familiar, protección del feto humano y condiciones para la interrupción del embarazo, vigente desde 1993, permitía el aborto sólo en tres supuestos -malformación del feto, violación o peligro para la salud de la madre-.
Según los datos del Ministerio de Sanidad, en 2019 se practicaron en Polonia (con casi 38 millones de habitantes) apenas 1.110 abortos legales. De ellos, la gran mayoría -1.074, o el 96 %- se llevaron a cabo por malformación del feto.
jc (efe, reuters, dw)