Los trabajadores automotrices en huelga en Estados Unidos amenazan con ampliar su huelga a más plantas si no se logran avances significativos para el viernes.

El sindicato United Automobile Workers (UAW) está en huelga desde el 14 de septiembre en una planta de ensamblaje de Ford en Michigan, una planta de General Motors en Missouri y una planta de Stellantis en Ohio.

Esta es la primera vez que los tres grandes fabricantes de automóviles se ven afectados por huelgas simultáneamente.

La principal preocupación de los huelguistas es la supuesta resistencia de las empresas a compartir ganancias récord, así como la estructura salarial escalonada impuesta, que paga a los trabajadores más nuevos mucho menos que a sus compañeros veteranos que trabajan en el mismo puesto.

Los trabajadores piden una reducción de la brecha salarial, así como beneficios adicionales.

Los Tres Grandes propusieron aumentos del 20 % durante el plazo de cuatro años y medio de sus acuerdos propuestos, aunque eso es sólo la mitad de lo que exige la UAW hasta 2027.