Desde Israel, a donde llegó este 24 de octubre en señal de respaldo de su Gobierno a ese país tras el ataque de Hamás, el presidente francés Emmanuel Macron propuso que la actual coalición internacional desplegada contra el autodenominado Estado Islámico en Irak y Siria se amplíe para combatir a Hamás. Mientras tanto, miles de civiles palestinos siguen sufriendo las consecuencias de la guerra: decenas más murieron en las últimas horas, en medio de un sonoro aumento de los bombardeos israelíes. La ONU urge a incrementar la insuficiente ayuda humanitaria que hasta el momento ha llegado al enclave.
Las potencias mundiales siguen mostrando su fehaciente respaldo al “legítimo derecho a la defensa de Israel”. Paralelamente, al menos 5.791 palestinos han perdido la vida en Gaza por los bombardeos- entre ellos más de 2.000 niños- desde que el Ejército inició su respuesta al sangriento ataque de Hamás en suelo israelí, el pasado 7 de octubre, que dejó alrededor de 1.400 víctimas mortales.
El presidente Emmanuel Macron es el más reciente mandatario que arriba a Israel en señal de respaldo. Este 24 de octubre, tras reunirse con familias de los fallecidos y secuestrados por el movimiento islamista, Macron propuso una coalición militar internacional que combata a Hamás, similar a la ya empleada contra el autodenominado Estado Islámico en Irak y Siria.
Para los gazatíes, la situación se agrava después de 18 días con escasez de agua, alimentos, medicinas y energía eléctrica. En el enclave palestino, ningún lugar es seguro para resguardarse de los incesantes ataques aéreos.