Esta consulta, realizada en 15 departamentos del país, se tomó la opinión que la población mayor de 18 años tiene acerca de distintos funcionarios e instituciones de la actual administración pública, como el Congreso Nacional, principales municipalidades y la Presidente, Xiomara Castro.
Y es precisamente la mandataria a quien se le derrama de las manos su popularidad. Por ejemplo, una de las interrogantes en la consulta decía: ¿Qué calificación le daría usted a 19 meses de gestión de la presidenta Xiomara Castro?
En donde tan solo el 4.1 % de los encuestados considera que es muy buena la gestión;frente al 4.8% de hace seis meses atrás.
Lo que es muy terrible para las aspiraciones gubernamentales, porque representa una caída de 0.7%; mientras que en el mismo lapso, el pocentaje de quienes la consideraban buena cayó 2.4%.
Al menos el segmento de quienes la consideraban como una mala administración hace seis meses con 27.3% se reducjo a 26%.
Otra reducción sustancial en estos últimos seis meses es en la percepción de una administración regular, en la que hace seis meses era de 37.1% y ahora 33.7%.
Pero aumentó la cantidad de hondureños que al cumplirse un año ya la consideraban como muy mala gestión desde un 17.7% hasta un actual 24.7%, es decir un enorme 7% más de desaprobación.
Obviamente, para que estos resultados se hayan dado de esta forma, ha sido necesaria una confabulación de malas decisiones de algunos funcionarios, con el incumplimiento de ciertas promesas de campaña, que por cierto, han tropezado con obstáculos puestos por la oposición a sabiendas que todo punto a favor del actual gobierno se traducirá en puntos contra la misma oposición hacia las próximas elecciones; nada nuevo por cierto, así ha funcionado siempre.
De ahí que el tema de las emociones entre los actores de los diversos partidos políticos a la hora de la toma de decisiones, sea en el Ejecutivo o en el Legislativo, asome muy interesante.
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