Varias personas intentan entrar en la Embajada iraní en Oslo durante una airada manifestación.

 

El jueves continuaron las protestas en varias ciudades de Irán por la muerte de una joven bajo custodia policial, informaron las redes sociales y estatales.

Un grupo de derechos humanos reveló que al menos 83 personas habían muerto en casi dos semanas de manifestaciones.

 

Mahsa Amini, de 22 años, de la ciudad kurda iraní de Saqez, fue arrestada este mes en Teherán por “vestimenta inadecuada” por la policía moral que hace cumplir el estricto código de vestimenta de la República Islámica para las mujeres.

“Se confirma que al menos 83 personas, incluidos niños, han muerto en (las) #IranProtests”, escribió en Twitter Iran Human Rights, un grupo con sede en Noruega.

 

A pesar del creciente número de muertos y la feroz represión de las autoridades, los vídeos publicados en Twitter mostraban a manifestantes pidiendo la caída del sistema clerical en Teherán, Qom, Rasht, Sanandaj, Masjed-i-Suleiman y otras ciudades.

 

La televisión estatal informó de que la policía había arrestado a un gran número de “alborotadores”, sin dar cifras.

 

Por su parte, los grupos de derechos humanos alegaron que decenas de activistas, estudiantes y artistas han sido detenidos y el Comité para la Protección de los Periodistas detalló en un tuit que las fuerzas de seguridad habían arrestado al menos a 28 periodistas hasta el 29 de septiembre.

 

Mientras tanto, la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania manifestó este jueves que quería que la Unión Europea impusiera sanciones a Irán tras la muerte de Amini.