El mar y la seguridad atan a estadounidenses y europeos a un pueblo costero de Nicaragua

NOTICIAS GIRASOL TV

Atraídos por la belleza natural, la seguridad y la tranquilidad, decenas de estadounidenses y europeos llegados como turistas se quedaron a vivir en un pueblo costero de Nicaragua, ajenos a las convulsiones políticas del país.

Sitio ideal para el retiro o emprender negocios, el municipio de San Juan del Sur, situado en la costa pacífica a 140 km al sur de Managua y próximo a la frontera con Costa Rica, es el principal polo turístico del país, con una imponente bahía y encantadoras playas.

«Me gusta el estilo de vida de Nicaragua en general», dice la estadounidense Christina Alty, quien hace 10 años llegó de vacaciones por un mes atraída por el surf y ahora se dedica al negocio inmobiliario.

En medio de condenas internacionales al presidente Daniel Ortega por su giro autoritario y cuestionadas reelecciones desde 2007, los extranjeros viven contentos en esta tranquila zona que ofrece playas, restaurantes, bares, avistamientos de ballenas, caminatas y paisajes.

«Aquí hay muchas opciones para las personas que aman el estilo de vida al aire libre», agrega Alty, de 37 años, madre de dos niños que estudian en una escuela bilingüe del pueblo de casi 17.000 habitantes.

«Mis clientes son probablemente de todo el mundo. Muchos de ellos son estadounidenses o canadienses, y también disfrutan de un estilo de vida diferente. El ritmo de vida es mucho más lento aquí que en el lugar de donde vinieron», agrega.

Mientras Alty camina por la playa, unos turistas descansan en sillas, otros se tumban en la arena, practican deportes o disfrutan un chapuzón en el mar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.