En un comunicado emitido por la ONU, se cuestiona en el mismo el papel del Gobierno de Honduras en la implementación de un mecanismo internacional, imparcial, independiente y autónomo contra la corrupción y la impunidad, conocido como CICIH. La reunión vía telefono este fin de semana entre el Sr. Eduardo Enrique Reina García y el Sr. Miroslav Jenča revela un preocupante estancamiento en el proceso.
A pesar de que el Memorándum de Entendimiento, firmado en diciembre de 2022, pretendía sentar las bases para avanzar en estas medidas anticorrupción, la ONU destaca que las reformas fundamentales necesarias aún no han sido adoptadas por el Gobierno hondureño. El equipo de expertos desplegado en cuatro ocasiones identificó estas reformas, pero la falta de progreso evidencia la falta de compromiso por parte del Gobierno.
El comunicado subraya que, aunque se han logrado ciertos avances, persisten obstáculos significativos que están frenando la instalación de la CICIH.
Carlos Umaña, miembro del Frente Parlamentario en apoyo a la CICIH, ha señalado específicamente la entrega de subvenciones a diputados, la existencia de una Ley de Amnistía y la resistencia a desmantelar lo que él denomina la «carpa de corrupción». Estos factores, según Umaña, están impidiendo la materialización de un mecanismo que podría ser crucial en la lucha contra la corrupción e impunidad en el país.
La ONU, a través de su Secretaría, insta al Gobierno hondureño a superar estos obstáculos y cumplir con las reformas básicas identificadas. Además, el comunicado subraya que la disposición de la Secretaría para examinar un eventual acuerdo bilateral no debe ser obstruida por la falta de acción del Gobierno.
La comunidad internacional observa con atención este proceso, y la ONU reitera su compromiso de apoyar al pueblo hondureño en la lucha contra la corrupción y la consolidación del estado de derecho. Sin embargo, la responsabilidad recae en el Gobierno de Honduras para demostrar su compromiso efectivo con la transparencia y la rendición de cuentas.
